¿ES MEJOR SALTAR LA CUERDA QUE CORRER?
Saltar la cuerda es conocido por ser una excelente forma de quemar muchas más calorías por hora que otras formas de ejercicio cardiovascular. ¿Cómo se compara con correr? Si tu objetivo es mejorar como corredor, entonces no. Pero si buscas mejorar tu resistencia cardiovascular con menos obstáculos, saltar la cuerda podría ser más efectivo que correr. Vamos a descubrir cómo.
Correr es algo en lo que los humanos somos especialmente buenos, sobre todo en correr largas distancias; sin embargo, no está exento de problemas.
La mala forma al correr puede causar muchos problemas en los tobillos, rodillas y caderas. Muchas personas mayores tienen que reducir la cantidad de carrera que hacen debido a los problemas que pueden surgir. Aquellos con un índice de masa corporal (IMC) más alto también pueden experimentar dolor debido al impacto de correr en superficies duras como el concreto o el asfalto. Las periostitis (shin splints) y las rodillas de corredor son solo dos de los muchos problemas a los que se enfrentan los corredores. Además, puede ser difícil encontrar rutas seguras para correr con superficies planas y sin tráfico. Para los corredores aficionados, mantener un ritmo constante puede ser un desafío difícil.
¿Cómo puede el salto de cuerda abordar estos problemas? Si comparamos el "speed step" en el lugar con correr, es mucho más fácil lograr una forma eficiente con un impacto significativamente reducido en las articulaciones. Si saltas con música, puede ser muy fácil sincronizar tu salto con un ritmo específico y rastrear esto como una variable de intensidad. ¿Saltaste a 90 bpm durante 3 minutos en la última sesión? Genial, intentemos 95 bpm esta vez; eso es un aumento del 5% en la velocidad. Aunque las periostitis también pueden ser frecuentes en el salto de cuerda, es mucho más fácil erradicarlas con una buena técnica y una elección adecuada de la superficie para saltar. Hablando de superficies, todo lo que necesitas es un espacio de 1m² para entrenar velocidad, lo que significa que puedes hacerlo en la esquina de tu gimnasio, casa o jardín. Poder hacerlo en interiores significa que no tienes que preocuparte por el clima, el tráfico o terrenos peligrosos.