¿SE PUEDE SALTAR LA CUERDA EN INTERIORES?
Para algunas personas, saltar en casa es la opción más conveniente o la única disponible. Esto podría deberse a un horario de trabajo ocupado, compromisos familiares o la falta de acceso a un gimnasio.
Si eliges saltar la cuerda en interiores, debes considerar en qué habitación lo harás y, por lo tanto, qué tipo de suelo es el adecuado. Idealmente, una superficie lisa y plana, como la madera o el laminado, debería ser tu primera opción. Si no tienes estos disponibles, tu mejor alternativa es un piso de concreto liso o azulejos. Ten cuidado con estos tipos de superficies, ya que pueden ser resbaladizas incluso cuando no están mojadas. La última opción sería una alfombra. Aunque no es lo ideal, si es tu única opción, vale la pena recordar por qué no es ideal: la alfombra tiende a hacer que el arco de la cuerda rebote excesivamente en su superficie cuando el cordón la golpea, lo que dificulta su control.
Si saltas sobre una superficie de azulejos o alfombra, puede ser útil invertir en una alfombrilla delgada para saltar, lo que mejorará las condiciones y te ayudará a aprovechar al máximo tu entrenamiento.
Independientemente del lugar que elijas para saltar la cuerda en interiores, mantente alerta ante otros posibles riesgos de seguridad, como cables sueltos y objetos que puedan provocar tropiezos. Evita habitaciones con lámparas colgantes de baja altura. Y si tienes vecinos debajo, ten en cuenta el ruido que generarás al saltar dentro de casa.
En general, saltar en interiores es una excelente manera de hacer ejercicio en un espacio donde te sientas completamente cómodo, es conveniente, libre de condiciones meteorológicas impredecibles y totalmente gratuito. Ya sea que tu entrenamiento con la cuerda sea una rápida sesión de cinco minutos o una hora dedicada al entrenamiento, saltar en interiores puede ser una gran solución.